sábado, 5 de octubre de 2013

Cambios! Cambios! Cambios!

Bueno, después de una relación a distancia durante 14 meses y días... Finalmente las circunstancias terminaron con lo que muchos pensarían era lógico y predecible, pero que para mi en su momento me parecía imposible que sucediera. Me decepcioné increíblemente de mi relación con mi mejor amigo, además de la distancia que nos separaba y que cada vez se volvía más monótono a causa del poco tiempo del que yo disponía para estar con él cuando iba a visitarlo a SLP.

Las mentiras, el ocultarme cosas, el que todo lo que le decía su madre y todo lo que le decía yo le entraba por un oído y le salía por el otro, el hecho de prestarme poca atención a sabiendas de que yo me encontraba muy sola en esta enorme ciudad, no pareció importarle. Y si le llegó a importar o si se llegó a dar cuenta siquiera... lo supo ocultar bastante bien.

Mi vida no sólo cambió en ese aspecto, sino que se ha encontrado con diferentes incognitas y circunstancias. A pesar de que la ruptura fue más dura para él, que para mi...

Llegué al punto donde ya no sé que quiero hacer en mi vida. Por el momento sólo quiero enfocarme en mi trabajo y en las personas que han llegado y salido de mi vida en los últimos 5 meses.

Sin más estos cambios parecen no terminar nunca y eso me agrada, pues significa que estoy haciendo algo de mi vida.

Un mal negocio

A veces me gustaría pensar menos, sentir menos y querer menos... No me gusta cuando mi cabeza empieza a llenarse de pensamientos inútiles, no me gusta que mis lagrimas se ahoguen dentro de mi por el miedo a derramarlas, no me gusta tener miedo a perder, no me gusta tener miedo a ser olvidada, no me gusta sentir como siento.

Quiero aprender del verdadero desapego, evitar darle un valor emocional a cosas que no tienen sentido y dejar de buscar el amor en personas que parecen querer darme todo de si, pero que al final sólo se trata de turismo emocional, llegan y desordenan tu vida, tus sentimientos y tus pensamientos y luego se van.

Ya no quiero querer con el freno de mano puesto, pero la vida me ha enseñado a que es lo mejor cuando no estas seguro de que el cariño sea mutuo... A mi me gustaba desbordar mi sentir, ahora lo veo como un mal negocio...