lunes, 26 de noviembre de 2012

Mi jefe está de vacaciones X(


Hola!

Hace tiempo que me había olvidado de este pequeño espacio, aunque sé que sólo tú y yo frecuentamos este espacio, decidí entrar un momento para hacerte saber lo que he sentido últimamente.

Desde hace 58 días que me vine a vivir al Distrito Federal, sé que pude sonar entre mucho y poco tiempo, pero ésta es la primera vez desde que vivo acá que decidí entrar a mi blog. Estar casi 2 meses fuera de casa me ha dejado pensando en todas la veces que pensé en independizarme, trabajar, etc.

Recuerdo muy bien que pensaba en trabajar un año completo ahorrando cada centavo que ganara en mi trabajo para poder irme a vivir sola, aunque 5 años más tarde de lo previsto en mis planes anteriores. Sinceramente, aunque sólo trabaje 5 meses antes de salir de casa,  no pude ahorrar ni un centavo porque lo que ganaba era una verdadera vergüenza y ahora que estoy en el D.F. veo por fin mis sueños encaminados a algo que siempre soñé.

Cabe mencionar que este año mi vida ha cambiado más de lo que nunca antes lo había hecho. Este año empecé siendo estudiante, a los 2 meses titulada y desempleada, al mes y medio empleada de la UASLP y a los 5 meses empleada en el D.F. y viviendo fuera de casa. Así mismo pase de ser soltera a en una relación dos veces este año. De la primera ocasión si llegué a comentar cuando empezó y así mismo cuando terminó.

De mi segunda relación sigo sin creer lo que sucedió, uno de mis mejores amigos, del cual muchas veces divague, pensando en cómo sería una relación con él, que era posible que termináramos andando, que sentía que él gustaba de mi, entre otras divagaciones raras, pero que nunca quise comentar nada, porque muchas personas decían que nosotros terminaríamos juntos, pero como pasó el tiempo y simplemente no pasaba algo, todos abandonaron la idea.

Tiempo después de que Víctor y yo termináramos, uno de mis mejores amigos se fue a Houston, Texas a vivir, dejando el trió desamparado y convirtiéndolo en un dúo... Razón de sobra para que yo buscara pasar mi tiempo con él, aunque fuéramos sólo los dos. Llegando semana santa, salimos al cine solos por primera vez, ya que me encontraba desempleada y él de vacaciones, 8 días después fui a su casa a venderle Mary Kay a su madre ya que era lo único que podía hacer para ocupar mi tiempo sin descuidar a mi madre qué estaba lastimada de una rodilla. Ese día después de venderle a su madre, nos pasamos la tarde juntos hasta la noche, porque mi hermano quedó de pasar por mi pero se ocupó tanto qué tardó demasiado en ir a recogerme, algo en mi se conmovió.

Al poco tiempo de haber entrado en la UASLP a trabajar, él y yo ya nos habíamos acercado muchísimo, el 21 de abril nuestros labios se juntaron por primera vez intencionalmente a fin de saber como me sentía yo con respecto a él, ya que él estaba completamente seguro de lo que sentía por mi.

3 semanas más tarde la relación fue formalizada, era muy difícil al principio porque por mi horario era poco el tiempo que podíamos pasar juntos entre semana, después de habernos acostumbrado a estar cerca el uno del otro todo el tiempo.

Ésta fue la primera vez que realmente me dí la oportunidad de conocer a alguien antes de intentar una relación e inclusive la primera vez que no pretendí otra cosa mas que una amistad al conocer a alguien. Actualmente tenemos 6 meses y medio de novios, no ha sido fácil aceptar la distancia que en estos momentos nos separa, pero hemos acordado que vamos a sobreponernos a las circunstancias con tal de seguir juntos.

Quiero que sepas que te amo con todo mi corazón y que te llevo siempre conmigo aunque no pueda verte tan seguido como antes. Pero se que nuestra felicidad se sobrepondrá a las circunstancias

Tricia Puu~

domingo, 6 de mayo de 2012

Lo que hubiéramos sido tú y yo sino fuéramos tú y yo - capitulo 1


Capitulo 1 - El comienzo del final

En un estado de animación suspendida, me encuentro preguntándome ¿Por qué  o cómo es que llegue a estar a tu lado? En este momento lo único que puedo ver es tu rostro con los ojos cerrados, como dormitando... Ojalá y solo estuvieras durmiendo, eso me permitiría ver tus ojos una vez más y ver en ellos esa chispa que me llena y me mantienen de pie ante la adversidad porque siempre sentí que a tu lado nada importaría y todo se solucionaría. Pero el destino te alejo de mi, si tan solo te hubiera escuchado gritar mi nombre... Esto no hubiera  sucedido.

Por más que lo intento no puedo moverme, solo puedo quedarme mirando tu rostro fijamente y mientras el silencio de esta calle desierta me consume, mi mente vuela... Me lleva directo a la primera vez que te vi, y me hace volverlo a vivir, y como no queriendo cierro los ojos y te escucho preguntarme: 

- ¿Cómo dijiste que te llamas?, espera... no me digas... ¿Helena? 

Al decir esto yo te miro con un gesto de interrogación y contesto finalmente: 

- No... Me llamo Eneida, un nombre poco común lo sé, y tu nombre ¿es...? 

Hay una pausa antes de que me contestes, porque mientras miras mis ojos repites en voz baja mi nombre una y otra vez como para memorizarlo. Después de la pausa dijiste: 

- Perdona, si no hago eso te preguntaré tu nombre cada vez que te vea. Me llamo Sebastián. 

Pasado el momento de las presentaciones, cada quien vuelve a sus asuntos, yo estaba con ese hombre que me amó tanto que no pude soportarlo y tú estabas con un amigo tuyo que por casualidad también me conocía. Minutos más tarde entramos en la conferencia de "Vendedores de Felicidad" y no volvimos a dirigirnos la palabra sino hasta el día siguiente.

Detengo por un momento mi mente de retroceder más en nuestro pasado, que continua avanzando hasta el día de hoy, y me pregunto ¿Cómo es que logramos estar juntos después de habernos importado poco el día en que nos conocimos? Una lágrima se derrama por mi mejilla mientras mi vista se concentra una vez más en tu hermoso rostro inconsciente que comienza a perder su color. Acaricio levemente tus mejillas que han comenzado a tornarse frías y húmedas y  de tus labios robo el último aliento. Al besar tus labios pierdo mi estado entumido y de mi pecho sale un grito ahogado de desesperación, como el grito de una madre que ve la vida de su único hijo ser arrancada de este mundo.

Mientras trato de recuperar la calma, mi mente vuelve al momento en que tú y yo volvimos a tener contacto. Esperábamos pacientemente que nos dejaran probar uno de sus tantos productos que aseguraban liberarían nuestro espíritu y nos permitía alcanzar lo que mas deseáramos solo con lograr terminar el tratamiento adecuadamente. Me pare detrás tuyo mientras platicaba de mi última relación amorosa con el amigo que teníamos en común, en ese momento tú volteaste y escuchaste atentamente lo que yo decía. Alguien llamo a tu amigo al frente, oportunidad que aprovechaste para preguntarme de quien hablaba y comenzar a relatar tu propia historia personal. Al principio me pareció completamente extraño que un hombre como tú hablara con una extraña de sus relaciones sentimentales, poco tiempo después deje de fijarme en ese detalle y simplemente me deje llevar por tus palabras y compartí mis historias contigo también. 

Al final de la conferencia, no estaba segura de volver a verte, y esperaba de corazón poder volver a encontrarme con muchas de las personas que conocí en esa conferencia, aparte de ti. Cuando las dos semanas siguientes llegaron a su fin me encontraba parada nuevamente ante esa gran puerta de madera pensando a quienes encontraría en esta segunda conferencia y quienes se habrían esfumado de mi vida para siempre. Para mi sorpresa, poco después llegaron tus dos amigos a pesar de que uno de ellos me había dicho que lo más probable sería que no asistiría. Mi mente trata de darme una imagen incomprensible, por lo que no puedo recordar como te vi o que hice cuando llegaste una vez mas a asomarte en las puertas de mi vida.

Nuevamente detengo los "flash backs" y busco ayuda a mi alrededor, al no ver a nadie a mi alrededor comienzo a desespérame otra vez. 

- ¡¡Alguien que me ayude por favor!! - grito sin conseguir respuesta alguna. 

Miro de nuevo hacia ti, pero esta vez mi vista se centra en mi mano que sostiene tu brazo que no para de sangrar. Observo a mi alrededor y no puedo ver nada, la calle esta oscura, la luna está dormida y las luces de nuestro alrededor parecieran no funcionar. Quiero levantarme para buscar ayuda, aunque pienso que ya es demasiado tarde. Intento ponerme de pie pero mi conciencia me detiene y grita dentro de mi cabeza, "No puedes dejarlo aquí sólo, no te atrevas a abandonarlo, el jamás te abandono". Busco en mi pantalón mi celular y al encontrarlo me doy cuenta de que no tiene batería. Con el dolor de mi corazón comienzo a esculcar las bolsas de tu pantalón, y para mi sorpresa encuentro una pequeña caja de cartón de forro plateado. No quiero abrirlo, sin embargo lo hago, dentro de la pequeña caja se encuentra un bello anillo de plata con un Circonio morado, con las inscripciones "Te amo" en el, al verlo me viene a la mente la cita que habíamos acordado en el café que esta a unas cuadras de aquí, dijiste que tenias algo importante que decirme. Con los ojos llenos de lágrimas regreso la cajita al lugar en que la encontré y continuo buscando tu celular para llamar a una ambulancia, en la pantalla, una foto nuestra me hace romper en llanto, no puedo creer que esto esté sucediendo. Al llamar a urgencias, las palabras se resisten a salir de mi garganta pero aún así lo intento:

- Vengan... ¡¡vengan pronto!!, creo que esta muerto... por favor ¡¡tienen que ayudarlo!!

Con tranquilidad la señorita me pide que me tranquilice y que intente darle la dirección correcta, finalmente consigo la calma y le doy la dirección.

Al subir a la ambulancia, tomo tu mano y la acaricio mientras recuerdo la primera vez que me besaste, todo fue tan rápido que no pude reaccionar siquiera, tú y yo conversando de banalidades, yo pensando en que mi vida no podía ser mejor ya que tenía a un hombre en mi vida que me amaba con locura, nuevos amigos en los que yo confiaba y por supuesto, te tenía a ti, sabía que contaba contigo y eso me hacía feliz, de la nada te volviste hacia mí y con tus manos tomaste mi rostro y sin previo aviso robaste de mis labios el beso más dulce que jamás había sentido, incluso ahora pensar en ello hace que una descarga de electricidad me recorra de pies a cabeza, al principio no pude reaccionar pero conforme pasaba el tiempo comencé a dejarme llevar por el sentimiento del momento y te bese de vuelta. Con esta imagen en mi cabeza me acerco tu mano al rostro y la beso. En la ambulancia me dicen que todo va a estar bien, que todavía existe una esperanza. Yo no les creo, el golpe fue tremendo, y todo por andar en las nubes... Si tan solo hubiera reaccionado a tiempo, no habrías tenido que correr a salvarme. De mis labios sale un "Perdóname", me subo a la ambulancia aunque no estoy muy segura de querer ver esta escena, tu tendido en la camilla, inconsciente, pálido, la sangre derramándose de tus yagas abiertas... Y me pregunto ¿qué pasará?.

sábado, 5 de mayo de 2012

Detox

Han pasado ya 49 días desde que dijimos adiós, sin embargo, sigo sintiendo tu presencia aquí en mi mente, en mi corazón, en mi alma. Es estúpido pensar que a pesar de todo... te sigo queriendo. Me detengo y pienso para mis adentros, si esto es amor, obsesión, o alguna otra cosa que simplemente no me permite borrarte del todo. Anoche, soñé que me culpabas de todo lo malo que llevó nuestra relación a la destrucción. Me quedé helada al escuchar tu voz hablándole a mis amigos dándoles consejos para no perder una relación. Recordarte ya no duele, pero sin embargo esta desintoxicación me impide respirar. Así que no pienso callarlo más...

Por las noches, aun puedo sentir la dulce caricia de tus manos rozando cada centímetro de mi cuerpo, me detengo y recuerdo que ya no estas, me amarga este sentimiento, es tan áspero, tan duro, tan mío.
No me gusta aceptarlo, pero cuando mi mente se vuelve confusa, te conviertes en musa, de sentimientos y deseos que no me permito tener durante el día. Cada latido, cada suspiro, cada lagrima te pertenecen todavía.

Te quiero lejos, te quiero quieto, simplemente te quiero muerto. Saber que no respiras mas, saber que tu alma es inalcanzable, intocable. Tal vez así sería más sencillo arrancarte de mi. Quisiera poder sacarte de mis sueños y gritarte que me quieras o mueras. Simplemente encontrarme sin ti en mis pensamientos.

¿Cómo es que todo esto pudo suceder?, ¿Cómo cuando me sentía tan segura de mi misma, tan segura de tu estima, tan segura de que esto no terminaría? O al menos que no terminaría así... No he vuelto a saber de ti, más sin embargo es como si nunca te hubieras ido. Ya no quiero quererte, ya no quiero pensarte, ya no quiero escuchar mis canciones y derrumbarme al ver que ya no me saben igual.

Quiero volver a ser feliz, feliz sin ti, sin tu presencia, sin tu ternura, sin tu pasión, sin tu atención. Feliz por vivir, feliz porque no habrá nadie con mejor suerte que yo, ni nunca habrá nadie que sea tan amada como yo. Lo malo es que quiero ser amada como tú me amabas...

Hay ocasiones en que quisiera pedirte que vuelvas y me des otra oportunidad, pero no puedo permitirme tal humillación, no después de tu desconfianza y tu ira aparente que jamás comprendí. Adiós te digo hoy y espero de corazón que el dolor que provocaste en mi te impida dormir por las noches.

martes, 24 de abril de 2012

Un momento para recordar

Nunca antes me había detenido a pensar en lo que sucedía a mí alrededor, hasta que un día me tope con una extraña sensación en mi interior, la más fascinante de todas las sensaciones. La curiosidad, sentía ganas de saber porque nunca me había detenido a contemplar mí alrededor en lugar de solo avanzar con la vista en el suelo, preguntándome cuanto falta para llegar a mi destino, mirando de vez en cuando para evitar ser atropellada, pero nada más. Quería saber que se sentía dejar de tener prisa por llegar a mi destino, y contemplar la belleza de las plazas del centro, la gente que pone sus puestesillos para ganarse la vida con lo que ya no les sirve, y uno que otro puesto de aguas frescas y frituras o como siempre dice mi padre, el mejor negocio del mundo, la comida. Sentí la curiosidad más emocionante del mundo, saber que pensaba yo acerca de lo que me rodeaba, que sentía por estar viva hoy y ahora. Muchos dicen que los curiosos pierden mucho tiempo al preguntarse todo de todas las cosas. Mas sin embargo eso no me detuvo ni a mí ni a mi nueva sensación, por lo que decidí respirar profundamente y sentarme por un momento, - Al fin y al cabo que nadie es puntual en esta ciudad - pensé para mis adentros y me senté en una de las bancas que miraban hacia el centro de la plaza. Comencé a pensar en que muchas veces había pasado por ahí, pero no podría ni describir con exactitud esa plaza, y mucho menos decir que había a sus alrededores. Cuando al fin mis pensamientos dejaron de abalanzarse unos sobre otros, note que había un nido en el árbol frente a mí, que clase de ave lo habrá construido me dije, y por que escoger esta plaza que no es transitada por viejecitos que dejen sus migajas de pan para que coman las aves, y mucho menos tenia lugares donde hubiera tierra para poder buscar algunos gusanos para la comida, después de mirarlo por largo rato, me di cuenta de que estaba abandonado, probablemente la pajarita se había dado cuenta de su mala elección y emprendido el vuelo casi inmediatamente.


Al voltear hacia mi derecha, vi como un señor comenzaba a desperezarse y a dar vueltas alrededor de la plaza, me llamo mucho  la atención que el señor traía su cobija atada al cuello como una capa y al dar las vueltas llevaba los brazos al frente como si volara, contuve la risa, no quiero que se moleste, podría estar borracho o muy acalorado, de ser así debería de quitarse la cobija de la espalda, pensaba mientras escuchaba a un par de señoras de edad avanzada y condición muy humilde discutiendo  si Chanita debía casarse con Perenganito ya que estaban esperando un bebe, ¿qué van a pensar los amigos de la familia si se enteraran que van a tener un pequeño bastardo?, esta vez no pude contener la risa, afortunadamente no fue tan ruidosa como pensé que seria. La señora que se notaba mas preocupada parecía ser la madre de la tal Juana, y como siempre parecía pensar que el fulano ese no era bueno para su hija, lo más probable es que el solo quisiera estar con su hija para que lo mantuvieran, por lo que escuche, era un bueno para nada que no trabajaba y su hija una santa que trabajaba 3 turnos para ayudarles con el sustento del hogar mientras el padre se partía el lomo trabajando en la fábrica y ella con su "pinche" puesto de jicaletas. Quise distraer mi atención de la amena platica de la señora para intentar enfocar mi atención nuevamente en el señor que volaba con su capa de superman color azul con rayitas blancas, pero cuando voltee para buscarlo ya estaba durmiendo nuevamente, esta vez en el suelo donde el sol había estado dando toda la tarde.


Finalmente decidí ponerme nuevamente en marcha, no había ya mucho que mirar en esa plaza y mi amigo debía de estar esperando por mí, reí a mis adentros, ¡¡claro!! Si él es el más puntal que yo conozco, me concentre en recordar a donde me dirigía antes de detenerme a satisfacer mi curiosidad por lo que me rodeaba. Cuando llegue al lugar citado, me lo encontré muy concentrado en su celular, seguramente leyendo uno de sus tantos libros electrónicos, que a él tanto le gustan. Lo salude tratando de no asustarlo, cuando finalmente reacciono, me saludo y pregunto porque había tardado tanto, que él esperaba verme sentada esperándole desesperadamente como suelo hacerlo cuando llego muy temprano. No dije ni una palabra acerca de la sensación que me había asaltado hacia más de 40 minutos, simplemente sonreí y le dije:
- Sorry, se me hizo un poco tarde, no tenias mucho tiempo esperando ¿verdad?
- Je, je, no, de hecho tengo poco de haber llegado, creí que te encontraría molesta.
- Bueno, ya me tocaba llegar tarde a mí, ¿no crees?
- Mmm... Pero nunca pensé que a mí me tocaría esperarte.
- Ya olvidalo, vamos en marcha - dije comenzando a desesperarme.


Toda la tarde me la pase pensando en que realmente había disfrutado ese tiempo para "curiosear", aunque mi naturaleza es curiosa, nunca había sentido curiosidad por mi alrededor, mas bien, mi curiosidad siempre se centraba en los demás, lo que pensaban, lo que sentían, etc., mas nunca curiosidad por lo que me rodeaba y mucho menos por cómo me sentía yo al respecto de lo que me rodeaba, todo este tiempo que estaba pensando, aun me encontraba con mi amigo, el cual aun siendo algo curioso, se mantenía lo mas al margen que podía de los pensamientos de los demás, pero al notar que estaba increíblemente callada y dado que no estaba molesta con él, decidió romper el silencio y preguntar finalmente:
- ¿Estás bien?, te noto algo ausente, ¿sucede algo?...
- ...
- ¿Patty? - dijo mientras me tocaba el hombro tratando de hacerme reaccionar
- ¿Mande?, ¿qué pasa?...
- Nada, solo quería saber si estás bien, te noto muy ausente...
- Oh, no es nada, solo pensaba, pero no te preocupes, mejor presta atención al camino.
- No pasa nada, pero ¿en qué pensabas?, nunca te había visto así.
- No es nada, simplemente curiosidad...
- ¿curiosidad?, ¿y ahora de qué?
- Mmm... no creo que comprendas que esta vez es distinta, mejor conduce, tratare de no perderme tanto - dije con una sonrisa


Llego el final de la tarde y mi amigo me trajo directo a casa, cuando nos despedimos, me pregunto nuevamente si todo estaba bien, no supe que contestar, no había nada malo conmigo esta vez, mas sin embargo parecía que mi pequeño secreto significaba mucho más que tiempo para mí misma, como si hubiera hecho algo malo, normalmente me parecía mas mala mi antigua curiosidad de quererlo saber todo acerca de los demás, pero no esta vez, ahora quería saber más de mi mundo, del mundo que recorría a diario aunque fueran escasas calles y cortos periodos de tiempo, pero esta vez quería saber de qué forma me llenaría, y como eso me podía hacer crecer. Finalmente llegaron las palabras a mi boca - Si, nunca habían estado mejor - sonreí y cerré la puerta de golpe, corrí hacia mi casa y entre con toda prisa hasta mi cuarto, me senté en la cama y suspire profundamente, - ¿A donde iré mañana?, ¿qué lugar dejare que me asombre mañana? - No podía dejar de pensar que me esperaba al día siguiente, cuando estaba por cerrar los ojos, sonó mi celular.
- ¿Quien podrá ser a esta hora? - dije mientras miraba el teléfono, no lo reconocí, mas sin embargo conteste.
- Hola Patty
- ¿Quien habla?
- Habla Karen
- ¿Karen? ¿De dónde nos conocemos?
- La verdad no recuerdo bien de donde, pero sí recuerdo que me pediste que te hablara hoy, a esta hora.
- ¿Yo dije eso?, ¿Por que diría algo así?, ¿Y porque precisamente hoy y a esta hora?
- No lo sé, ya cumplí con mi parte, nos hablamos luego.


Colgó, no comprendí porque habría yo hecho algo así, y no recordaba haber hablado con ninguna Karen en el pasado cercano, tal vez alguien de mi niñez, pero ¿porque pedir un favor de ese tipo?, y ¿qué clase de persona recuerda ese tipo de favor? Sin darle más vueltas al asunto me dispuse a cambiarme para meterme a la cama. Cuando me dirigía al baño para lavarme los dientes, escuche un tremendo alboroto fuera de mi casa, no quise prestarle atención y continúe mi camino, pero esta vez el ruido era más fuerte, y algo insoportable. Decidí bajar a asomarme para ver que ocurría en el exterior, no pude llegar a contestar esa pregunta, porque  antes de tocar el último escalón, una sombra misteriosa estaba parada frente a mí, apuntando hacia mí, yo no podía entender lo que sucedía, pero lo único que pude hacer fue dejarme caer en el escalón para quedar sentada. Cuando hice esto, la sombra se acerco hacia mí y me pregunto mi nombre.
- Me llamo Patricia ¿quién eres tú?
- No puedo decírtelo, pero me han mandado aquí por ti.
- ¿Quien te mando aquí?, no manches suena como a una película chafa de ciencia ficción.
- No te creas, soy tu vecino, lo que pasa es que escuche mucho ruido en tu casa y quería saber si estabas bien.
- Toda una vida de vecinos y es la primera vez que vienes a verme.
- Lo que pasa es que nunca me había preocupado tanto por alguien que no conozco.
- ¿Y porque estabas preocupado? según yo el ruido venia de afuera de mi casa, no de dentro de ella.
- Este... ¿en serio?, demonios...
- ¿Que sucede?
- Nada, debo irme.
- ¿Mmm?... ok, cuídate y cierra la puerta detrás de ti.
- Nos vemos


Cuando mi vecino salio de mi casa, me pregunte - ¿Que se trae entre manos este hombre?, ¿que era ese ruido? y lo mas importante, ¿Cómo demonios entro a mi casa? - seguí dándole vueltas al asunto, pero sin obtener ninguna respuesta, me dispuse a dormir, y en lugar de dirigirme a mi cama, me dirigí hacia afuera, quería saber que era lo que había sucedido. Al llegar a la puerta de afuera me encontré con una calle llena de olor a pólvora, probablemente los hijos de mi vecino de enfrente habían estado jugando con cuetes. Voltee a ver hacia mi casa, cual seria mi sorpresa al ver que la enredadera del techo de mi casa estaba toda quemada, con razón el vecino quiso  cerciorarse de que estuviera bien, pero aun no podia comprender como se había metido a mi casa. Ya mas tranquila, me metí a mi casa, a fin de cuentas no paso nada grave. Me dispuse a dormir realmente esta vez, ya no quería que nada interrumpiera mi camino hacia un nuevo día, cerré los ojos y despedí de ese día con un suspiro, esperando que el mañana fuera mucho mas productivo y mas lleno de curiosidad por crecer y ser mejor cada día.

jueves, 5 de enero de 2012

Just another one to lose some time

Wow... siempre que dejo pasar el tiempo y no escribo en  el Blog me pasa caada cosa...

5 años y medio  han pasado ya desde que entre a la universidad, en estos momentos me hace falta entregar mi residencia para poder comenzar mi tramite de titulación. Y como en estos momentos no tengo ganas de documentar mi aplicación, it's history time :D

Hace aproximadamente 7 días me fui en un viaje corto con mi hermano, su amigo de toda la vida Arturo y su amigo del trabajo Victor, para esto, desde Noviembre yo había empezado a salir de nuevo con David (mi ex) en plan de volver a estar juntos pero requeríamos tiempo para que el se desintoxicara de su relación anterior con una "amiga" mía. Total que en el viaje, Victor y yo nos acercamos un poco y comenzamos a platicar (lo que hacen los viajes... jeje porque a Victor lo conozco desde que mi hermano entro a trabajar ahí hace 3 años), y después como que por fin comencé a mostrarle a Victor que me interesaba y cómo que nació una pequeña llama entre los 2.

Lo primero que hice regresando del viaje fue enviarle un msj para dar seguimiento a nuestro encuentro, lo cual quedó en que nos veríamos de nuevo y acto seguido, llamé a David para ver que opinaba de que yo saliera con Victor lo cual le resultó a él muy emocionante y a mi su emoción me resulto ofensiva ya que se suponía que el quería que regresáramos, me enoje y nos peleamos, pero seguí adelante con el ver a Victor (lo cual me resultaba bastante emocionante, dado a que yo hacía tiempo que quería acercarme a él).

La cita con Victor fue bastante interesante, porque sí en el viaje me sorprendió el hecho de que podía hablar de verdad con él, en nuestra cita me resulto increíble ver lo mucho que tenemos en común. Durante ése día estuvimos platicando y quedamos en conocernos mejor antes de pensar en cualquier otra cosa. El Domingo primero de Enero fuimos al cine David, su hermanita con varios amigos, Susy y sus hermanos, Victor y yo. Después del cine, cada quien de regreso a su casa, el lunes saqué mi licencia con la hermana de David y no vi a Victor, pero los msjs flotaban en el aire desde que salimos la primera vez. Y el martes que va a casa con mi hermano para que los acompañara a la uni a entregar unos papeles. En la uni se me declaro y yo con emoción le dije que siii :D

Llevamos 2 días :S sin embargo, siento que tengo más tiempo con el, es muy extraño, pero me gusta lo que siento.

Eso es todo por el momento :)

Saludines

Tricia Puu~